¡Hágase tu voluntad, PADRE Nuestro, aquí en la tierra como en el cielo! ... ¡SEÑOR, que se haga siempre tu voluntad porque siguiéndola siempre todo me irá bien! ¡Y cuando no sepa cuál es tu voluntad, SEÑOR, envíame a tu ESPÍRITU para que me ayude a discernir! ¡Que se haga, SEÑOR, tu voluntad y no la mía! EN EL NOMBRE DE JESÚS, AMÉN.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario