Querido DIOS!
Tu Amor es como una llama que arde y nunca se apaga dentro de mi corazón. Este corazón que a veces se agita y se asusta cuando vienen tiempos difíciles. Este corazón que tiembla y llora cuando no entiendo tus procesos. Gracias porque en mis horas más oscuras tu Luz llega a mi vida recordándome que siempre debo CONFIAR en TI. Por eso hoy guardo silencio y espero. Porque tu Amor es la clave para mantener esta pequeña vela encendida que guía mi vida, mis pensamientos, mis sueños.
Gracias por la Tranquilidad y la Paz que siempre me das.
Me levanto hoy en Victoria declarando que "Todo lo Puedo en Cristo que me Fortalece" Amen!
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