No es fácil lo sé… Continuar caminando cuando las fuerzas se acaban. Mirar para todos lados y sentir que no hemos avanzado. Y sentarnos a contemplar el panorama de nuestra vida pensando que jamás lo lograremos.
…Y cuando llega el cansancio a querer entorpecer nuestro día, tener que asumir postura y hacer como si nada pasara. Lo sé, porque también lo he vivido.
Pero he aprendido a DESCANSAR en los brazos de mi SEÑOR!!!
Por eso cuando siento al viento venir, y escucho el estruendo de las muchas aguas que en ocasiones intentan arrastrar con todo a su paso, miro al cielo y me enfoco en mi SALVADOR. Porque sé que de allá arriba viene mi socorro y mi descanso. Porque en momentos así, solo el descanso de DIOS me puede dar Paz.
SEÑOR, enséñanos a descansar en Ti.
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