A veces tienes que soltar aunque no quieras. Porque si aprietas con fuerza, puedes llegar a ahogar o sofocar y creo que ese no es el propósito de ninguna buena persona.
A veces es necesario soltar, para desocupar tus manos y recibir lo nuevo que está por venir.
Sí, yo sé que el proceso puede ser doloroso, pero más doloroso es tratar de atar a ti algo que no te pertenece, algo que nunca fue tuyo!!!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario