Dios es nuestro amparo y fortaleza

Dios es nuestro amparo y fortaleza Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones Por lo tanto no temeremos. Salmos 46:1-2.

DIOS mío y SEÑOR mío: Te alabo y te bendigo por hacerte presente en cada instante de mi vida. Anímame a tener los ojos siempre abiertos para no tropezar con las dificultades que me encuentre por la vida. Ayúdame a darme cuenta que soy alguien capaz de lograr todos mis sueños y proyectos si todo lo pongo bajo la dirección y protección de tu ESPÍRITU SANTO. Sólo estando Contigo puedo salir adelante sin tenerle miedo a nada. Confío hoy en tu Poder, en tu generosidad para seguir llenándome de Bendiciones. Y ser luz y sal para quienes me rodeen. En el nombre de JESÚS, Amén