¡Persiste!

¡Persiste!

Aunque el sendero esté plagado de obstáculos y situaciones que muchas veces te decepcionen; mantente firme y constante, recuerda que es DIOS quien te ha llamado. Y si las pruebas te hacen pensar por momentos que no has de lograr lo que DIOS ha dispuesto para ti, en vez de abandonar, resiste, no olvides que esta carrera es solo para valientes.

DIOS no se equivocó al elegirte, el vio en ti potencial, características y cualidades.

No te apartes ni a izquierda ni a derecha, mantente enfocado en tu llamado y objetivo.

¡Prosigue, sigue empeñándote! Verás que quien trabaja y lucha por sus ideales, alcanza muchos de sus objetivos.

DIOS entregó un tesoro en tus manos, no sueltes nunca tus manos del arado, ni tus pies huyan de la responsabilidad que Jehová te ha encomendado. No consientas, ni escuches las voces de aquellos que no entienden el don que DIOS te ha regalado y entregado. Sé como el fiel soldado que aunque muchas veces no comprende lo que está pasando, obedece y sigue las instrucciones de aquel que lo ha reclutado.

¡Persiste, persevera e insiste, no fue el hombre, es DIOS quien te ha ESCOGIDO y LLAMADO!