Ven, ¡oh Santo Espíritu!:
ilumina mi entendimiento, para conocer tus mandatos;
fortalece mi corazón contra las insidias del enemigo;
inflama mi voluntad... He oído tu voz,
ilumina mi entendimiento, para conocer tus mandatos;
fortalece mi corazón contra las insidias del enemigo;
inflama mi voluntad... He oído tu voz,
y no quiero endurecerme y resistir, diciendo: después..., mañana...
¡Ahora!, no vaya a ser que el mañana me falte.
¡Oh, Espíritu de verdad y de sabiduría,
¡Oh, Espíritu de verdad y de sabiduría,
Espíritu de entendimiento y de consejo,
Espíritu de gozo y de paz!:
quiero lo que quieras, quiero porque quieres,
quiero como quieras, quiero cuando quieras...
quiero lo que quieras, quiero porque quieres,
quiero como quieras, quiero cuando quieras...
Josemaría Escrivá